¿Por qué el diamantado de suelos?
Cuando un suelo ha llegado a un cierto nivel de deterioro y el cristalizado ya no responde, produciendo un brillo pobre y un aspecto desagradable, es aconsejable diamantar el Suelo y éste quedará como nuevo
¿Como diamantar?
Al igual que el rebajado, es necesario refrigerar la acción mediante agua. Extender abundante agua sobre el suelo y colocar el primer juego de diamantes bajo la rotativa en contacto con el suelo. Para diamantar lo haremos con pasadas lentas y cruzadas, sobre una superficie pequeña de 2 metros cuadrados, aproximadamente, añadiendo agua si es necesario. Recoger la pasta que haya producido mediante un aspirador o fregona y repetir la operación con los diamantes de grano mas fino.
La elección del gramaje de los diamantes, así como el número de granos que queremos pasar, va en función del deterioro del suelo y del nivel de acabado que deseemos. Lo habitual es pasar los diamantes Franfurt 60, 120 y 220 siendo suficientes para una buena recuperación.
El microrebajado con diamantes solo actúa sobre la parte más superficial del suelo y por lo tanto no hay peligro de gastar el grosor de la baldosa. Al trabajar con un diámetro más alto, la rapidez y uniformidad del proceso es mayor reduciendo el riesgo de mordeduras típicas de las máquinas de rebajar. Los diamantes utilizados dependen de las necesidades de cada suelo, disponemos de todos los modelos que puedas necesitar para cada situación, las diferentes durezas de cada diamante están representadas por distintos colores.
